Pregunta: ¿Está permitido consumir hígado de pato?
Respuesta: El pato es, definitivamente, un ave pura, apta para el consumo, y por lo tanto también su hígado lo es. En principio, el hígado de pavo no posee un sabor especial, a menos que se trate de pavos a los que se ha alimentado en forma de “abuchamiento”. O sea que se alimenta al pavo en forma forzada tres veces por dia, en cada ocasión aprox. medio kilo de maíz cocido. La forma de alimentarlo es la siguiente: Se utiliza una procesadora especial a la que se une adosa un tubo extenso, cuyo largo y ancho se adaptan al esófago del pato. Este tubo se introduce en el esófago del pato a través de la boca y se lo hacen girar por medio de una palanca que posee el mecanismo para tal efecto, y así se introduce el maíz por la fuerza dentro del esófago del ave. Asi se procede durante tres semanas, hasta que el pato alcanza prácticamente el doble de su peso original.
Los problemas halàjicos que esta práctica presenta son numerosos y escapan a este contexto por lo que analizaremos solo los principales y la conclusión halajica al respecto.
Al introducir en forma forzada alimento en el esófago del animal, tanto el mismo alimento como el tubo que se introduce pueden lastimar el esófago y este tipo de herida convierte al ave en “terefa” -no apto para la ingestión-. Y no siempre se puede averiguar si el animal sufre de este tipo de herida o no, por lo que existe divergencia entre las autoridades halájicas sobre si se puede consumir. Este es el motivo principal que esgrimen quienes prohíben el consumo de este tipo de patos.
Otro aspecto que es necesario analizar es que, como es sabido, después de realizar este proceso los patos que los sufrieron no viven por mucho tiempo por lo que se apresuran a sacrificarlos inmediatamente después de las dos semanas de haberlos alimentado de esta forma. Debido a esto hay quien sostiene que el solo hecho de que estos patos no pueden continuar con vida, es síntoma de “tarfut” –no aptos-.
En principio no solían consumir este tipo de patos sino en algunos lugares de ashkenaz en los que imperaba una gran pobreza y cebo de estos patos era barato, por eso, y tratándose de épocas de grandes carencias, muchas autoridades permitieron el consumo de estas aves. Sin embargo en Israel nunca realizaron esta pràctica con los patos. Por esto escribe el gran erudito Rabí Tzvi Pesah Frank z”l –gran rabino de Jerusalen hace aprox. 60 años- que si se puede anular esta práctica será considerado una gran acción. También el gran erudito Hazon Ish z”l afirmó que no se debe llevar a cabo esta práctica en la tierra de Israel pues incluso por esta costumbre que imperaba en la diáspora nos lamentamos, por lo que no debemos de agregar una nueva autorización a este tipo de ave.
De todo lo anterior inferimos que existen serias dudas sobre la condición casher de estas aves según la Tora. Por ello, cuando nuestro maestro R. Ovadia Yosef, Shlit”a fue consultado por una importante autoridad rabínica de Paris sobre si extender certificado “cosher” a los restaurantes que importan este tipo de ave de Israel, le respondió que actuó correctamente al negarse a autorizar el expendio de estas aves, especialmente si se tiene en cuenta el sufrimiento –tzaar baale hayim- que se implica para las mismas este tipo de procedimientos, lo cual asimismo representa una prohibición de la Torá. Pues la técnica para alimentar al ave es incluso difícil de observar para las personas delicadas, y nuestra sagrada Torá, como lo afirmara el rey Salomon: Sus caminos son agradables y sus senderos, de paz.
Sin embargo, en los últimos años esta técnica sufrió grandes cambios y se comenzó a utilizar un tubo, para alimentar al animal, mucho más angosto del que se venía utilizando, y asimismo se alimenta a las aves con un pure suave de arroz que no lastima la garganta del ave (problema principal del cashrut). Tambien hay quien sostiene que de esta manera el ave sufre menos y por lo tanto existen más argumentos para permitir su consumo. De todas formas incluso así existen argumentos para prohibirlas. Por ello escribe Rabí Shlomo Amar, Shlit”a, Gran Rabino de la tierra de Israel, que aùn cuando se podría autorizar este consumo, no se debe colocar en la certificación Cosher, “mehadrin”, o sea casher por encima de cualquier duda, ya que todavía siguen existiendo ciertas dudas sobre el cashrut de este alimento.
En realidad, en este último tiempo se prohibió esta forma de alimentar a los patos en Israel, y en la diáspora, en la mayoría de los lugares, no se utilizan todas las mejoras arriba mencionadas, por lo tanto existen argumentos serios para considerar estas aves “terefá”, prohibidas por la Tora.
Aún asi, si en determinado lugar se utilizan las mejoras que hemos mencionado más arriba, como un tubo más angosto y alimentos suaves para evitar herir al animal, y certifica el proceso una organización de cashrut responsable, que revisan tras la shejitá que el animal no posee heridas en su esófago, quien lo consume tiene en quien apoyarse. Y quien evita consumirlo convoca sobre si la bendición celestial, así nos respondió nuestro maestro, Shlit”a, al ser consultado al respecto.