Afirma el Talmud (Ta´anit 26b) que decretaron nuestros sabios que en la seudá hamafseket–última comida previa al ayuno- no se debe consumir carne ni beber vino así como no se deben comer dos comidas diferentes, por ej. arroz y huevo. Y aún cuando el Talmud prohíbe el consumo de carne exclusivamente en la comida previa al ayuno, se difundió la costumbre de abstenerse de comer carne a partir de Rosh Hodesh Ab hasta el diez del mismo. Esta costumbre ya está citada en las obras de los gueoním y los rishonim –primeros grandes comentaristas- y se generalizó en todo Israel. A estos efectos no existen diferencias entre la carne de res o de ave. Incluso comidas cocinadas con carne de cualquier tipo están prohibidas estos días pues contienen el sabor de la carne. Pescados no se hallan incluidos en la prohibición.
Los ashkenazim por un lado se abstienen de consumir carne incluso el día de Rosh Hodesh, sin embargo los sefaradím sí consumen carne el día de Rosh Hodesh mismo. Por otro lado, los sefaradím no consumen carne incluso todo el día 10 de Ab, sin embargo los ashkenazím lo hacen a partir del mediodía.
El Shabbat Hazon, o sea el Shabbat previo al 9 de Ab, está permitido consumir carne en la comida sabática, e incluso el viernes está permitido probar la comida del shabbat para determinar si le falta sal o condimentos, etc. Algunas opiniones sostienen que incluso sin que medie ninguna necesidad se pueden probar el viernes las comidas del Shabbat, pues de acuerdo a la opinión de los mekubbalim –autoridades de la Cabbalá- es de suma importancia probar esta comida. Escribe nuestro maestro Rabí Ovadiá Yosef, z”l, que se puede asumir esta opinión, sin embargo quien se abstiene convoca sobre sí la bendición.
Escribe nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef, z”l, que las sobras de la comida sabática pueden ser consumidas motzae shabbat, o sea la salida del Shabbat en la seudá reviit, -cuarta comida sabática que se lleva a cabo el sábado por la noche-. E incluso los que comen los restos de comidas del Shabbat durante esta semana tienen en quien apoyarse. Los pequeños que no alcanzaron la edad de bar mitzva pueden consumir libremente las comidas de carne del Shabbat durante esta semana (a condición de que no se cocine para Shabbat una cantidad exagerada de manera que reste para la semana). Los niños más pequeños, que no comprenden la dimensión del duelo de esta semana, pueden consumir carne libremente e incluso se puede cocinar para ellos comidas con carne.
Los enfermos, aún cuando no presenten peligro de vida pueden consumir carne esta semana, lo mismo que la parturienta durante los treinta días posteriores al parto. También aplica esto para la mujer que está amamantando y el abstenerse de comer carne puede debilitarla y consecuentemente debilitar a su hijo, puede comer carne. También la mujer embarazada puede comer carne esta semana si siente cierta debilidad. Sin embargo, cualquier otra persona que consuma carne esta semana, está trasgrediendo un decreto rabínico lo cual es de suma gravedad.