Pregunta: La mujer embarazada que tiene altas posibilidades de dar a luz en Shabbat, por lo que deberá viajar en automóvil en Shabbat ¿debe pasar el Shabbat alojada cerca de la clínica u hospital para evitar profanar el día sagrado?
Respuesta: por supuesto como en cualquier caso en que peligro la vida humana, es preciso hacer lo necesario para protegerla. En este caso si a la mujer le sobrevienen dolores de parto o contracciones en Shabbat debe pedir por teléfono una ambulancia o taxi que la conduzca al lugar donde dará a luz. Y tanto su esposo o parientes que la acompañen tienen la misma obligación si la mujer no está en condiciones de hacerlo, y puede uno de ellos, pariente o esposo, acompañarla en el trayecto si así lo necesita para darle tranquilidad.
Con respecto a la pregunta que nos ocupa, si es necesario que el viernes deje su casa y se hospede en la cercanía del hospital, analiza este caso Rabí Shmuel Halevy Vozner, Shlit”a (Shebet Halevy tomo 8 cap. 88), y escribe que si esto supone una gran complicación, no es necesario hacerlo. Adhiere a esta opinión el gran rabino de Tzantz (Dibre Iatzib cap. 175). Y aunque la persona debe hacer lo posible para evitar profanar el Shabbat por la parturienta, con respecto a viajar en automóvil se considera lo mismo “melajá sheena tzerijá Legufá”, o sea una obra cuyo objetivo principal no es el buscado. El Talmud ejemplifica esto con la persona que cava un pozo simplemente para conseguir la tierra de la excavación y no para utilizar el pozo, esta obra no es considerada una prohibición de la Torá sino rabínica. Lo mismo aplica en nuestro caso en el que viajar no es el objetivo por sí mismo, como en el caso de un paseo, sino para lograr la atención médica.
Por otro lado no existe la certeza absoluta de que el parto se producirá en Shabbat, por lo tanto no es necesario tomar este recaudo y puede la mujer permanecer en su casa para el Shabbat.
Nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef z”l escribió que si la mujer puede hospedarse en un hotel u otro lugar en las cercanías del hospital en el que eventualmente dará a luz, y puede hacerlo sin muchas complicaciones, debe hacerlo, pero si esto le supone demasiado esfuerzo puede permanecer en su casa.