Una de las prohiiciones del día de Tisha Beab es la de calzarse.
Esta prohibición aplica exclusivamente a los calzados de cuero
En cuanto a los calzados deportivos, de tela, goma, etc, que son no menos cómodos que un calzado de cuero pero por supuesto no son de cuero, dictamina en la obra Simhat Cohen cap. 173 que debido a que en la literatura rabínica que habla del tema, tanto las más antigua como la contemporánea no citan sino la prohibición de calzar cuero, el calzado deportivo no se prohíbe. Y así lo legisló nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef z”l en su obra Hazon Ovadia sobre los ayunos folio 299.
En cuanto a los zapatos de símil cuero, sumamente similares a los de cuero, analiza nuestro maestro su prohibición, en principio debido al “marit ha´ain” o sea a que la gente considere que quien los calza menosprecia la prohibición de Tisha Beab y está calzando cuero. De hecho, así lo legisló Rabí Shlomo Zalmen Awerbaj z”l. Sin embargo nuestro maestro z”l escribió que debido a que en la actualidad este tipo de calzado es sumamente común, no necesariamente sospecharán de quien los calce.
En cuanto a los zancos, confeccionados simplemente con una cinta de cuero, destinada a sostener el pie a la base de madera o goma, siendo que esta cinta de cuero no cumple con la función de proteger al pie sino simplemente de sostenerlo es permitido su uso. Nuestro maestro cita esta opinión en el folio 301.
El Rab Abi Haezri z”l y otras autoridades de las primera épocas autorizan calzarse a aquellos que viven en zonas o barrios de gentiles para evitar la burla. Sin embargo Maran en su obra Bet Yosef no aceptó esta opinión debido a que la burla no debe ser motivo para evitar el cumplimiento de una práctica instituida -incluso- por los rabinos. Mas aún teniendo lo que escribe la obra “Mishha Derebutá” que en la actualidad, en que incluso los gentiles calzan todo tipo de calzado, deportivo, símil cuero, etc. nadie se burlará de un judío que calce lo mismo.