Pregunta: Tras cortarse las unñas ¿es preciso realizar “netilat yadaim” –lavado ritual de manos- como se lo hace en la mañana?
Respuesta: En principio, existen cuatro clasificaciones para la “netilat yadaim”. La primera, es el lavado ritual de manos matutino, al despertar. La segunda, el lavado previo a comer pan. La tercera netilà es la que se realiza antes de comer un alimento sumergido en agua y la tercera el lavado de manos al tocar algo sucio o ingresar en un lugar impuro –baño, etc.- o lleva a cabo una acciòn que amerite la “netilat yadaim”.
El Talmud (Pesajim 112ª) afirma que la persona debe lavarse las manos después de cortarse la uñas, y quien no se lave las manos después de cortarse la uñas sufrirá temores por un día sin que puede descubrir el origen de dicho temor. Y asì lo dictamina Maran (Shuljan Aruj cap. 4 inc. 12).
Escribe Rabì David Abudarham z”l (uno de los grandes rabino sefaradìes de hace 600 años aproximadamente) que existen siete acciones que, tras realizarlas es preciso lavarse las manos, a saber: La persona que se levanta de la cama por la mañana. El que sale de hacer sus necesidades. La persona que se ducha. Quien se corta las uñas. El que se saca los zapatos –y los toca-. El que se toca los pies y quien se rasca el cuero cabelludo. Algunos sostienen que tambièn deben lavarse las manos quien camina entre los muertos, quien toca un muerto, quien revisa sus ropas de piojos, quien tiene relaciones maritales y quien se toca el cuerpo con las manos. Si realiza alguna de estas acciones y no se lava las manos, si se trata de un erudito olvidarà sus estudios y si es una persona comùn perderà su sano juicio.
Concluìmos entonces, que la persona que se corta las uñas debe lavarse las manos. En una pròxima entrega veremos el origen de este lavado y la forma en que debe realizarse, si es necesario hacerlo como se hace en la mañana o es suficiente con enjuagarse las manos.