Como es obvio, debido a la pandemia muchas personas deben permanecer aislados tanto por hallarse infectados como por prevención, y escribimos como deben proceder para dar cumplimiento a este precepto. Nuestro maestro R. Ovadia Yosef z”l escribió que la lectura que es oída viá telefónica o internete no pueden considerarse válidas pues obviamente no es la voz de la persona misma la que se oye sino una voz transmitida electrónicamente, por lo tanto no se pede tomar como lectura válida de la Meguilá. Lo mismo aplica hoy para una lectura via Zoom, la cual de ninguan forma puede considerarse valida para cumplir con el precepto.
Ahora, si la persona se halla totalmente aislado y no puede escuchar de ningua forma la lectura de la Meguilá, escribió Rabí Hayim Palachi z”l en su obra Ruah Hayim que podrá leer la misma desde un libro o Meguilá impresa, obviamente sin pronunciar las bendiciones correspondiente ya que se trata sólo de una lectura simbólica.
En el Talmdu (Meguilá 14) pregunta por qué no se recita el Halel, cantico ritual que se recita al finalizar la amidá en las mañanas de los días festivos, como lo hacemos en Janucá. Responde el Talmud que la lectura misma de la Meguilá es una suerte de Halel, pues toda ella es un reconocimiento de los Milagros obrados por el Todopoderoso cuando el malvado Hamán intentó aniquilar al pueblo judío.
Teniendo en cuenta lo anterior, escribió Rabí Shlomo Kluger z”l en su obra Shnot Hayim cap. 336 que quien no dispone de una Meguila apta para la lectura, deberá recitar el Halel al terminar su amidá. Y así lo concluyeron otras autoridades. Incluso uno de los grandes casuistas de los primero tiempos, el Meiri cita esta legislación. Sin embargo, escribió el Hid”a (Birque Yosef cap. 693) que debido a que esta legislación es algo innovadora y no la citan la mayoría de las autoridades, no debemos aplicarla.
Nuestro maestro, Rabí Ovadia Yosef z”l escribió que la persona que no posee una Meguila apta y leerá la misma desde una Meguilá impresa, debe pronunciar el Halel completo sin embargo sin la bendición que lo antecede.