En las dos entregas anteriores aprendimos sobre la obligación de la Torá de pronunciar el Kiddush el viernes por la noche y el precepto rabínico de santificar asimismo el día de Shabbat en la mañana antes de la comida.
Todo individuo de Israel está obligado a pronunciar el Kiddush; de todas formas la costumbre establecida es que cada padre o jefe de familia pronuncia el Kiddush en nombre de todos los integrantes de la familia presentes al momento de hacerlo. Pues la regla halájica afirma que quien oye es como si pronunciara –shomea queone-, o sea que la persona que oye el Kiddush es considerada como si lo pronunciara. Por lo tanto, escribe Rabí Ovadia Yosef, z”l, (de acuerdo a los citado por Rabí Shemuel Abohab z”l en su obra Debar Shemuel) que en el momento en que el jefe de familia recita el kiddush y pronuncia el nombre de D-os en la bendición, los oyentes no deben responder Baruj Hu Ubaruj Shemo como habitualmente se responde al oír el nombre de divino, pues las bendiciones en las que el oyente debe cumplir su obligación oyendo, no se debe interrumpir para responder Baruj Hu Ubaruj Shemo. El motivo para ello es que al ser considerado el oyente como si estaría bendiciendo por sí mismo, si responde Baruj Hu….estaría interrumpiendo en medio de la bendición y por lo tanto estaría alterando el texto instituido por los sabios para la misma.
Teniendo en cuenta que todos los oyentes cumplen su obligación de recitar el Kiddush al oír el mismo del jefe de familia, es necesario que pongan atención desde el comienzo hasta el final del Kiddush y concentrarse en que con dicha atención dan cumplimiento al precepto del Kiddush en el cual están obligados. Asimismo quien recita el Kiddush debe concentrarse en que al pronunciar el Kiddush permite a los oyentes dar cumplimiento a su obligación de recitar el Kiddush. (ver al respecto halajot Meguilá)
Está prohibido comer o beber desde el momento de la caída del sol el viernes hasta que se pronuncie el Kiddush, incluso agua está prohibido beber hasta el Kiddush. (Si recibe el Shabbat aún de día de todas formas tendrá prohibido comer o beber hasta el Kiddush)
Previo al Kiddush debe tenderse un mantel sobre la mesa sobre el que se colocarán 2 halot –panes de Shabbat- lo cuales deberán ser cubiertos por otro mantel pequeño o cubrepán. Esto es en recuerdo al man que caía del cielo para el pueblo de Israel en el desierto y el cual era cubierto por dos capas de rocío, una por debajo del mismo y otra por encima. El Talmud Yerushalmi agrega que si permanece el pan descubierto y se bendice primero el vino, se estaría menospreciando al pan, e incluso existen opiniones que sostienen que si el pan no se haya cubierto es preciso recitar el Kiddush sobre el pan y no sobre el vino, por todo ello es preciso cubrir el pan y posteriormente pronunciar el Kiddush.