Pregunta: Se puede llorar en Rosh Hashan en las plegarias para invocar la misericordia divina? O acaso es preferible desarrollar las plegarias con alegría?
Respuesta: Analizaron las autoridades rabínicas si en el día de Rosh Hashana es asimismo un precepto alegrarse al igual que en las demás festividades como Pesaj, Sucot, Shabuot.
De hecho, determina Rab Ahay gaón (Sheelatot parashat Haye Sara) que también en Rosh Hashana es preciso sentirse alegre como en las demás festividades. Y así también concluye Rab Sar Shalom gaón (responsa citada por el Ro”sh en el cap. 4 del tratado de Rosh Hashana). También el Rashb”a cita (responsas tomo 4 cap. 262) en nombre de Rab Hay gaón que está prohibido ayunar el día de Rosh Hashana, como afirmara el profeta Nehemías “Ved, comer gorduras y bebed dulzuras pues la alegría del Eterno es vuestra fuerza.
Sin embargo, es obvio que el día de Rosh Hashana está destinado a la plegaria y los ruegos al Eterno, como enseñara Rabí Itzjak ben Gueat z”l en su obra Mea Shearim folio 44). Y no se debe ayunar en Rosh Hashana, y la interpretación de nuestros sabios en cuanto a que es preciso acercarse a D-os durante estos diez días de arrepentimiento –aseret yeme teshuba- se refiere a que son días destinados a la plegaria y el ruego al Eterno, no al ayuno. Por lo tanto no se debe evitar el precepto de alegrarse en Rosh Hashana lo cual es un precepto propio del Yom Tob, día festivo.
De todo lo anterior se concluye que no se debe llorar y sufrir en las plegarias del día de Rosh Hashana pues es un día festivo y por lo tanto alegre y así deben asumirse las plegarias del mismo .
Sin embargo Rabi Hayim Vital z”l, el destacado alumno del Ari z”l testimonió que su gran maestro lloraba en las plegarias de Rosh Hashana y que enseñaba que quien no siente brotar el llanto en las plegarias de este día, es síntoma de que su alma no es íntegra y digna. Todo esto está citado por nuestros grandes maestros de los últimos tiempos.
Pero en la obra Maase Rab (compendio biográfico del gaón Rabí Eliahu de Vilna z”l) cita en nombre del gaín de Vilna que no se debe llorar en las plegarias de Rosh Hashana. Como relata el libro de Nehemías, que todo el pueblo lloró y el profeta Nehemías y el mismo Ezra, el escriba los exhortaron diciéndoles: Hoy es un día sagrado para vuestro D-os, no debéis hacer luto no llorar. Ved y comed gorduras, bebed dulzuras… pues la alegría del Eterno es vuestra fuerza. Por ello el gaón de Vilna insistía en que el oficiante en Rosh Hashana debía recitar el Kaddish cantado.
Todo lo cual nos presenta una divergencia entre el Ari z”l y el gaón de Vilna, en realidad la enseñanza del Ari z”l se ve sumamente enfrentada por la afirmación de los mismos versículos del profeta.
Nuestro maestro, Rabí Ovadia Yosef z”l, (Yebia Omer tomo 1 sec. 36 y tomo 9 sec. 51) escribe que en realidad no existe discusión al respecto. Ya que es opinión unánime que es preciso alegrarse durante este día, sin embargo aquellos que durante Rosh Hashana asumen la santidad del día de una forma muy profunda y ello despierta en ellos el llanto y el lamento por la carencia espiritual, en este caso no está prohibido llorar.
Como escribe el Ture Zahab (Sh. Aruj cap. 288 inc. 2) y cita un relato según el cual los alumnos de Rabí Akiva hallaron a su maestro en Shabbat recitando el libro de Shir Hashirim –El cantar de los cantares- en medio de un llanto y le explicó a sus alumnos que aún cuando está prohibido llorar en Shabbat, pues está escrito “y llamarás al Shabbat deleite”, aquellos que se deleitan con el llanto pueden llorar. Explica el Ture Zahab, que Rabí Akiva, debido a su absoluto apego al Eterno al leer el Cantar de los Cantares internalizaba los profundos conocimientos que allí aparecen y ello lo llevaba a derramar lágrimas de profunda emoción. Lo mismo ocurre con ciertos eruditos que su concentración el la plegaria los lleva a derramar sendas lágrimas en la misma. En numerosas ocasiones pudimos presenciar como nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef z”l en medio de la lectura del párrafo semanal de los profetas, en Shabbat, derramaba lágrimas de emoción por el contenido profundo del mensaje que él comprendía e internalizaba profundamente.
Esto mismo aplica a aquellas personas que se emocionan y sienten profundamente las plegarias del día sagrado de Rosh Hashana y ello los lleva al llanto, se trata de una actitud loable y de elevada espiritualidad. De hecho el Ari z”l, profundo conocedor de los secretos místicos del judaísmo y una de las figuras rabínicas más respetadas de los últimos tiempos debido a su devoción, piedad y temor a D-os indudablemente no contradecía la enseñanza de la Torá sino actuaba con la corrección que sus grandes conocimientos le conferían.
Y por supuesto lo mismo aplica a cualquier persona que su sensibilidad lo lleva en las plegarias de este día al llanto espontáneo, es una actitud que muestra una gran espiritualidad y no está prohibida. Sin embargo estimular o inducir el llanto no está permitido pues se trata de un día festivo, que como lo expresar el profeta Nehemías debe alegrar y no enlutar al individuo así como ocurre con las demás festividades. Y aún cuando algunas autoridades rabínicas contemporáneas sostienen que es preciso inducir el llanto en las plegarias de este día, no esto lo apropiado como lo desarrollamos más arriba y como lo sostuviera nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef z”l.
