Es un precepto de Tora escribir el versículo Shema Israel y la porción que lo continúa, Vehaya Im Shamoa, sobre un pergamino y colocarlo en la jamba de las puertas de la casa, como está escrito: Y las escribiréis sobre las jambas de vuestras puertas (Debarím 6,11).
Todo judío está obligado en el cumplimiento de este precepto, también las mujeres, como dice el versículo y las escribiréis –estas palabras de Torá- sobre las jambas de vuestras puertas…para que se alarguen vuestros días. Explica el Talmud que también las mujeres desean una vida longeva por lo tanto también ellas debe cumplir con este precepto.
Algunos sostienen que las mujeres no debe fijar la mezuza, sin embargo nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef z”l (Halijot Olam tomo 8 folio 201) disiente de esta opinión y dictamina que las mujeres pueden fijar la mezuza pronunciando la bendición correspondiente.
Un niño o niña no deben fijar la mezuza, pues al estar exentos todavía de este precepto su acción no es válida halajicamente.
Afirma el Talmud (Menajot 43) que la persona que se coloca los tefilín en su brazo y cabeza, viste los tzitzit y posee una mezuza en su puerta tiene la seguridad que no pecará, pues posee distintos elementos que le recuerdan. Y son los ángeles que protegen al hombre del pecado, como está escrito: se sitúa el ángel del Señor alrededor de quienes le temen, y los protege. Y el mérito de este precepto protege a todos los integrantes de la casa, por ello se escribe en el reverso de la misma el nombre divino de “Shadday” cuyo escróstico en hebreo forman las palabras Shomer Daltot Israel –Quien cuida las casas de Israel—
El escriba de la mezuza debe ser una persona conocedora de las leyes sobre la escritura ritual, que son sumamente numerosas, y un hombre temeroso de D-os, lo mismo aplica para los tefilín y los rollos de la Torá. Y en principio es apropiado que un sefaradí adquiera tefilín y mezuzá según el rito sefaradí y el ashkenazí según el rito ashkenazí.