Escribe el Ramba”m, que la bendición sobre el azúcar como lo conocemos es la de “sheacol…”, bendición genérica sobre todo alimento que no crece de la tierra o del árbol.
El Talmud (Berajot 36b) que un tipo de alimento denominado “humalta”, aparentemente procesado según Rash”i de especies aromáticas con miel, corresponde a la bendición de “adama”.
Escribe el Tur (cap. 203) en nombre de Rabenu Meir de Rotemborg z”l (maestro del Ro”sh) que las especies aromáticas molidas y mezcladas con azúcar poseen la bendición de “adama”, como la humalta a la que hace referencia el citado Talmud. El Bet Yosef (Rabí Yosef Caro en su obra sobre el Tur) escribe que evidentemente esta legislación está explícita en el Talmud que hemos mencionado, por lo tanto qué es lo que Rabí Meir de Rotemborg z”l nos viene a enseñar? Interpreta el Bet Yosef, que el alimento al que se refiere el Talmud, la humalta, probablemente se procesaba con trozos de especies que mantenían su forma original y se reconocía la especie vegetal de la que provenían por ello la bendición, afirma el Talmud es la “adama”, sin embargo si las especies vegetales se muelen o trituran totalmente podríamos haber especulado que las mismas quedan nulas al azúcar y por lo tanto la bendición correspondiente sería la de “sheacol”, nos enseña Rabí Meir de Rotemborg z”l que aún si se hubiesen molido las especies no se convierten en secundarias al azúcar y conservan la bendición de “adama”.
Y así lo legisla Maran (Sh. Aruj cap. 203) que las especies aromáticas molidas y mezcladas con azúcar poseen la bendición de “adama”. El “Caf Hahayim” (Rabí Ya´acob Hayim Sofer z”l) interpreta que esta legislación de Maran se refiere a las especies vegetales que conservan su forma o que fueron cortadas pero totalmente trituradas, pues si se las trituró o molió cambia su bendición a la de “sheacol” pues no se reconoce el origen del vegetal, y cita que así lo legisla la obra She”la. Inferimos según esta opinión, que todo alimento que pierde su apariencia original y no se reconoce su origen, posee la bendición de “sheacol”.
Sin embargo nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef, Shlit”a, disiente de esta opinión y tras un análisis extenso afirma que la obra “Bene Yehuda” ya se opuso a esta legislación del Shel”a y afirma que según Maran aún cuando se halla triturado el alimento y no se reconoce su origen mantiene su bendición original. Por lo tanto a estas especies vegetales mezcladas con azúcar se les debe pronunciar la bendición de “adama” y no “sheacol”.
Con respecto al popcorn hecho a base de granos de maíz, aún cuando al inflarse los granos pierden su apariencia original y no se los reconoce como granos de maíz, se debe pronunciar sobre los mismos la bendición de “adama”.
Agrega Rabí Moshe Feinstein z”l al respecto, que aún cuando aceptemos que el alimento pierde su bendición original si se lo procesa, esto aplica sólo si se lo muele o tritura totalmente, sin embargo en el caso del popcorn sólo se lo infló y todo el mundo reconoce los granos de arroz, por lo tanto la bendición correspondiente es la de “adama”.