Todo individuo perteneciente al pueblo de Israel debe cumplir con el precepto de la tzedaka, incluso aquellos mendigos que viven de la caridad ajena, deben dar tzedaka de aquello que reciben. En épocas en que el tribunal rabínico poseía potestad para hacerlo, obligaban a cada quien a colaborar según lo que evaluaban que podía dar. Y si la persona se negaba, el tribunal podía castigarlo incluso físicamente hasta que acepte cumplir con las indicaciones de dicha corte. Y aún cuando la regla halájica determina que no se obliga al cumplimiento de preceptos cuya retribución se halla explícita en el versículo, por ej. el caso de mandar a las palomas para tomar sus huevecillos o polluelos, sobre lo que está escrito que “extenderá tu vida”, sin embargo en el caso de la caridad se involucran también prohibiciones o trasgresiones para aquellos que no cumplen el precepto por lo que los tribunales sí obligaban al cumplimiento de la caridad.
Y tienen prohibido los encargados de la tzedaka presionar a las personas para que colaboren si saben que no se hallan en capacidad para hacerlo, por ej. en las sinagogas en las que realizan recaudaciones para tzedaka y presionan públicamente a las personas para que se sientan obligados a colaborar aún cuando no están en condiciones de hacerlo. Sobre esto escribe el Talmud (Baba Batra 8ª) que el versículo afirma “Y observaré –dice D-os- a quienes los presionan”, incluye esto a los encargados de la tzedaka.
Lo mismo aplica para las personas pudientes que ya hubiesen colaborado y cumplieron con su obligación, y se los presiona para que continúen aportando cuando ya no tienen obligación de hacerlo y lo hacen sólo por vergüenza, todos estos casos son considerados una forma de robo para los encargados de la tzedaka que así actúen. Sin embargo aquellos avaros que no colaboran en forma apropiada, es un debe presionarlos para que aporten a los fines de la tzedaka.
Ocurrió hace aproximadamente 25 años, Rabí Moshe Feinstein z”l debió personalmente salir a recaudar fondos para su Yeshiba que se hallaba en una situación económica sumamente difícil. Un hombre adinerado, perteneciente a una comunidad sefaradita, organizó una velada, dinner, en su casa a la que invitó un grupo de personas adineradas con la intención de que ayuden en esta noble y loable causa. El rabino dirigió un mensaje a los presentes y asimismo explicó la dura situación que atravesaba su Yeshiva, con la intención de sensibilizar los corazones de los presentes. Se repartieron sobres para que cada quien colaborase con la suma que consideraba apropiada. El dueño de casa, observó que las personas colocaban en los sobre sumas muy pequeñas, 100 o 200 dólares, pues al contar con sobre cerrados no se avergonzaban de colocar sumas pequeñas en ellos. Que hizo este hombre? Pidió que se le entregaran todos los sobres y se dirigió a los presentes en idioma árabe, el cual por supuesto el rabino no entendía, y amonestó a sus huéspedes en forma dura, señalándoles que este gran erudito de la Torá, uno de los sabios de la generación que dedicó su vida entera a la causa de la Torá se dirigía personalmente a ellos para pedir su ayuda, incluso deshonrando su investidura rabínica y uds. se comportan en forma poco honorable colocando en los sobres sumas que inmediatamente se diluirían en las obligaciones económicas de la institución!! Son sumas ínfimas en relación a lo que realmente uds. pueden colaborar. Por lo tanto, dejaremos los sobres y realizaremos una recaudación pública para ayudar generosamente al rabino, obviamente los resultados fueron diferentes y se logró recaudar una suma muy respetable que sirvió para saldar las deudas de la Yeshiva, lo cual llenó de satisfacción al gran erudito Rabí Moshe Feinstein z”l y le permitió continuar con su labor de difusión de la Torá ampliamente.
La persona que no se halla en condiciones de colaborar con grandes sumas, pero intercede ante otros para que colaboren, no sólo se considera esto sumamente meritorio pues brinda mérito a otros, sino que se considera que él mismo ha colaborado, pues como afirman nuestros sabios “es superior quien hace que otros den, a aquel que él mismo da”, como está escrito: “Y será la acción de la caridad, paz”,no está escrito “y será la caridad paz” sino la acción de la caridad, lo cual nos indica que al actuar para que otros colaboren también se considera tzedaka.