En la entrega anterior, vimos que no se debe evitar la “netilá” para comer pan vistiéndose guantes o envolviéndose las manos con una toalla, ya que se estaría aboliendo el precepto rabínico del lavado de manos. Veremos a continuación más al respecto.
El Talmud (Pesajim 46ª) analiza la situación de la persona que se halla en un camino y no posee agua para el lavado ritual de manos, que distancia de recorrer para conseguir agua y así lavarse las manos para consumir pan. Y enseña el Talmud que hacia adelante, es decir si la persona encontrará agua en su camino a una distancia de 4 “milim” –aprox. 4 kms.-, debe recorrerlos y lavarse las manos antes de comer el pan. Sin embargo, continúa aclarando el Talmud, si el agua se halla un “mil” –aprox. 1 km- hacia atrás, no exigen los sabios que deshaga su camino para conseguir agua y autorizan que se envuelva las manos o se vista guantes para poder consumir el pan.
Esta indicación del Talmud es dictaminada por Maran (Shuljan Aruj cap. 163). Algunas opiniones sostienen que incluso si es dudoso que conseguirá agua puede envolverse las manos para consumir el pan.
En cuanto a los 4 kms. hacia adelante o menos de un km. hacia atrás que debe recorrer para conseguir agua, en medida de tiempo suponen 72 minutos hacia adelante y menos de 18 hacia atrás. Estas medidas de tiempo deben tomarse en tiempo real de camino, aún si se desplaza con automóvil.
En concusión, si la persona puede conseguir agua en la continuación de su camino, a una distancia de 72 minutos, debe recorrerlos a fin de conseguir agua y no comer sin la debida “netilá”. Lo mismo aplica si conseguirá agua a una distancia de menos de 18 minutos de camino hacia atrás, debe retornar para conseguir el agua de la “netilá”. Si no consigue a agua dentro de estas distancias, podrá consumir pan utilizando guantes o envolviéndose la manos con una toalla o mantel.