Pregunta: Es preciso besar la mano de los padres la noche de Shabbat cuando se recibe la bendición de boca de losmismos?
Respuesta: El Talmud (Avodá Zará 17ª) relata que el amorá –sabio del Talmud- Ulá, besaba la mano de su padre cuando regresaba de la casa de estudios. Explica Rash”i al respecto, que se trata de una actitud de respeto hacia el padre o las personas mayores, besar el dorso de su mano al salir de la sinagoga.
El sagrado libro del Zohar relata que Rabí Eleazar, hijo de Rabí Shimón bar Yoajai –redactor del Zohar- besaba la mano de su padre y lo mismo hacían los alumnos de Rabí Shimon.
Y así procedía el Ari z”l quien cada noche de Shabbat visitaba a su piadosa madre y le besaba la mano para que esta lo bendijera. De allí se infiere que el Ari z”l comprendió que existe algún motivo basado en la Cabalá para besar la mano de los padres la noche de Shabbat. Y en su obra Sha´ar Hacavanot explica justamente este motivo, y los sabios de la Cabalá explica que es necesario besar la mano de los padres la noche de Shabbat, especialmente la mano de la madre. Si se halla dentro de sus posibilidades es necesario acercarse a la residencia materna para besarle mano la noche de Shabbat. Y así lo enseñó el Ari z”l a su alumno Rabí Hayim Vital z”l. Y así lo confirma el Hid”a en su obra More Beesba donde escribe que al besar la mano del padre debe pensar en que cumple el precepto de respetar a los progenitores y al besar la mano de la madre concentrarse en que existe un motivo místico para esto.
Existen al respecto distintas costumbres, algunos opinan que se besa la mano de los padres al terminar el recitado del Shalom Alejem previo al Kidush en tanto que otros sostienen que se besa la mano de los padres después del Kidush y se recibe la bendición de boca de ellos. Y así acostumbramos hacerlo en la actualidad, que recibimos la bendición de los padres –cuando se hallan en la misma casa- y les besamos la mano tras el Kidush previo a la netilat yadaim.
Entre las comunidades ashkenazitas no suelen besar la mano de los padres o los sabios aún cuando se trata de una costumbre ancestral y sólo se contentan con estrechar la mano. De todas formas los padres deben bendecir a su hijos la noche de Shabbat aún al estrechar su mano, como lo afirma el gran sabio Rabí Ya´acob Emdim z”l en su comentario sobre el sidur.
Sin embargo entre los sefaradím, como ya explicamos más arriba la costumbre es besar la mano de los padres y no se debe descuidar esta costumbre ya que posee orígenes sumamente importantes, como vimos anteriormente. Y así lo escribe el gran sabio y piadoso autor de la obra Reshit Hojma (cap. sobre la educación de los hijos) donde indica que se le debe enseñar a los hijos desde pequeños a besar la mano de los padres y de los sabios (ver la obra Shuljan Hamaarejet folio 56 que se explaya al respecto.