La persona que ve un rayo debe pronunciar la siguiente bendición: Baruj Ata A-donay Elohenu Melej Haolam Osé Maase Bereshit. Quien escucha un trueno debe pronunciar la siguiente bendición: Baru Ata A-donay Elohenu Melej Haolam Shekohó Ugburató Malé Olam. En todo caso, estas bendiciones deben pronunciarse en forma inmediata de haber oído el trueno o visto el rayo. Se entiende por inmediato que no pasó el tiempo en que puede pronunciarse el saludo al maestro, o sea “Shalom aleja rabí”, si ya transcurrió este lapso deberá esperar al próximo trueno o rayo para pronunciar la bendición en forma inmediata al mismo.
El Raaba”d, una de las grandes autoridades de los primeros tiempos, escribe que estas bendición no se pronuncian con el nombre de D-os como regularmente se lo hace en las bendiciones, sólo se dice Baruj Ose Maasé Bereshit o Baruj Shekohó Ugburató Malé Olam. Sin embargo, la gran mayoría de las autoridades de los primeros tiempos sostienen que se deben pronunciar como cualquier otra bendición, pues según el Talmud (Berajot 40) las bendiciones que no incluyen el nombre de D-os no se consideran como tales. Y así lo dictamina Maran (Sh. Aruj cap. 229).
Rabi Hayim Pontrimoli z”l autor de la obra Petaj Hadebir, escribe que escuchó de personas que no pronuncian estas bendiciones con el nombre de D-os, y en principio lo consideró como un error, ya que, como vimos si no se incluye en la bendición el nombre de D-os la misma no es válida. Sin embargo, posteriormente analizó la situación y consideró que la costumbre no está errada, pues si la bendición sobre los rayos y truenos no se pronuncia en forma inmediata a los mismos no puede pronunciarse, y así mismo existen otros detalles halájicos a tener en cuenta sobre esta bendición que justifican en general que no se pronuncie la misma con el nombre de D-os para evitar pronunciarlo en vano. De todas formas, agrega en la citada obra, que la persona experta en la halajá y conocedor de las condiciones para pronunciar esta bendición, debe pronunciarla con el nombre de D-os, es decir Barj Ata A-donay Elohenu Melej Haolam….
Sin embargo, nuestro maestro Rabí Ovadia Yosef, z”l disiente de esta opinión pues en este caso las condiciones son simples y se hallan escritas en todas las obras halájicas desde el Sh. Aruj, por lo tanto, se debe pronunciar la bendición según la establecieron nuestros sabios incluyendo el nombre de D-os en la misma como cualquier otra bendición, así como lo dictaminan la mayoría de las autoridades y el mismo Sh. Aruj.