Pregunta: El converso cuyo origen es europeo oriental –ashkenzi- y realizó su conversión en la tierra de Israel ante un tribunal rabínico autorizado ¿debe asumir las tradiciones ashkenazitas que se rigen según Ram”a o puede conducirse de acuerdo a los dictámenes del Shuljan Aruj y Maran que aplican a las comunidades sefaraditas?
Respuesta: Es de público conocimiento la afirmación talmúdica que dice que el converso es considerado una nueva criatura, es decir como si hubiese nacido nuevamente. Esta afirmación posee numerosas implicancias halájicas, una de ellas es que aún cuando el gentil que maldice el nombre divino posee pena de muerte, si alcanza a convertirse antes de recibir la pena capital queda exento de la misma, pues al convertirse es considerado como una nueva criatura.
Por lo tanto, teniendo en cuenta que Maran Rabi Yosef Caro z”l es considerado la máxima autoridad halájica en la tierra de Israel, y así los habitantes de Israel como sus alrededores se guían de acuerdo a los dictámenes de Maran, tanto para autorizar como para prohibir, escribe Rabi Ovadia Yosef, z”l, que el converso que realiza su proceso de conversión en la tierra de Israel es considerado como que ha nacido en esta tierra y por lo tanto debe asumir todos los dictámenes halájicos según la opinión de Maran, el Shuljan Aruj.
Y aún si los padres del converso son originarios de Europa oriental -ashkenaz- es absolutamente claro que no debe tener en cuenta las opiniones de Ram”a y los comentaristas ashkenazim, tanto para prohibir como para permitir cuando estos disientan del Shuljan Aruj, pues el converso al ser considerado una nueva criatura se relaciona “filialmente” con la tierra de Israel, su nueva cuna y deja de relacionarse definitivamente con su pasado.
En síntesis, el gentil que ha realizado su proceso de conversión en la tierra de Israel, debe asumir para sí los dictámenes halájicos de Maran, autoridad de la tierra de Israel. Incluso debe rezar según el rito sefaradí que es considerado el más correcto según el Ari z”l –máxima autoridad Cabalística-. Y no incide en absoluto el país de origen del converso, y tanto si procede de un país oriental como de uno occidental, debe conducirse de acuerdo a las tradiciones de la tierra de Israel, es decir a lo legislado por Maran en el Shuljan Aruj.